Tan preocupados estamos por sacarnos
de encima todo aquello que nos pesa
con tanta torpeza
que cuando andamos livianos
la vida nos resulta aún más cansina
Tanta premura tenemos para durar
en una vida aburrida
que apuramos el reloj
arrancándole las pilas
Tan desesperados vamos
por escucharnos solo a nosotros y,
contestándonos al oído
que se nos agota el tiempo
buscando lo que no hallamos
Tiempo nunca hay
solo disculpas vanas,
todos deprimidos con dolor fingido
por lo perdido, esperando que el tiempo
los mate
para luego llorar con sentido
